Minerales críticos como el litio, el cobalto y las tierras raras que están en el corazón de muchos de los dispositivos que utilizamos a diario, siguen en la mira de la industria por la demanda proyectada. Sin embargo, su escasez y concentración geográfica han generado nuevas tensiones y desafíos geopolíticos.
Durante la PDAC 2025, la ministra de Minería, Aurora Williams, comentó que actualmente la cartera está elaborando una estrategia de minerales críticos, la cual incluirá entre sus ejes esenciales el fomento a la exploración minera, con el objetivo de aumentar el conocimiento sobre las reservas de los minerales que Chile defina como críticos y estratégicos. “A través de esta estrategia, buscaremos aprovechar las oportunidades que ofrece esta creciente demanda global, facilitando el desarrollo de una industria minera sostenible y competitiva”.
Sobre la demanda global de minerales críticos, especialistas dejan ver que ésta responde a una combinación de factores estructurales vinculados al desarrollo tecnológico, la transición energética y la transformación digital.
Jorge Cantallopts, director ejecutivo de Cesco, precisó que “tecnologías como la electromovilidad, la generación de energías renovables, el almacenamiento energético y las infraestructuras de comunicación requieren insumos minerales que no siempre están disponibles de forma diversificada o segura en los mercados globales”.
El ejecutivo agregó que “otros sectores estratégicos, como la defensa, la medicina, la industria aeroespacial y la seguridad alimentaria también están impulsando una mayor demanda de minerales específicos”.
“En este contexto, muchos países han comenzado a clasificar ciertos minerales como críticos o estratégicos, atendiendo no sólo a su importancia funcional, sino también a la vulnerabilidad de sus cadenas de suministro”, dice Cantallopts.
Por su parte, Irene Del Real, profesora asistente en Ingeniería en Minería de la Pontificia Universidad Católica de Chile, sostuvo que “actualmente, la transición energética es un actor relevante en la demanda global de minerales críticos, ya que la cantidad que se consume de estos para construir paneles solares, turbinas eólicas o autos eléctricos es considerablemente mayor que la que se necesita para generar energía a través de fuentes convencionales”.
Del mismo modo, la académica manifestó que “la demanda de minerales críticos también dependerá de aspectos geopolíticos, especialmente cuando la oferta de ciertos minerales está concentrada en lugares geográficos muy específicos. Por ejemplo, China concentra la mayoría de la oferta de tierras raras, minerales críticos esenciales para la transición energética, por lo que cualquier cambio en la producción de estos minerales en China afectará directamente la demanda global”.
De acuerdo con estas consideraciones, Francisco Acuña, Principal Consultant del CRU, afirma que “hoy en día, lo más importante es la seguridad de abastecimiento y el proteccionismo de la cadena de suministro, y cómo esto puede impulsar el desarrollo de industrias de nuevas tecnologías”.
Proyección de la demanda
Los expertos coinciden en que, a mediano plazo, se prevé que la demanda de minerales críticos —como litio, cobalto, níquel, tierras raras y cobre— siga en ascenso, impulsada principalmente por la transición energética, la electrificación del transporte y el desarrollo de tecnologías bajas en emisiones.
No obstante, Patricia Gamboa, directora de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco, afirma que “este crecimiento podría experimentar una moderación respecto de las proyecciones iniciales, debido a diversos factores, entre los cuales la geopolítica juega un rol relevante”.
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Fuente: MCH